sábado, 2 de mayo de 2015

Así es, así somos. Nuestra realidad actual.

¿Realmente somos tan libres y tan independientes como decimos ser? ¿Tenemos tanta personalidad cómo queremos aparentar? ¿Nos da igual en realidad lo que dicen de nosotros?
No. Nada de esto es verdad. Vivimos en una sociedad en la que queda poca gente que sea él mismo en todos los ámbitos. Me explico. Hablemos de algo tan sencillo como la ropa. Todos queremos ser muy originales, pero, ¿lo somos? Yo creo que no. Hoy en día la mayor parte de las tiendas venden los mismos productos, las mismas prendas, con leves diferencias, pero las mismas. ¿Y cómo acabamos nosotros? Llevándolas, como no. Normal, la verdad, porque te los acaban metiendo por los ojos sí o sí, y por ahí es por donde tienen que entrar las cosas, las vemos tantas veces que nos acaban gustando. Vayas a donde vayas, ahí están, y obviamente, todos picamos, algunos más que otros, pero todo lo hacemos. A mí, quitando alguna que otra excepción, me acaba pasando el efecto contrario. Me aborrecen. Veo tantas veces esas cosas que llega un momento en el que mire a donde mire, por la calle, en las tiendas, en un centro comercial, en un parque, al vecino, todo el mundo lo lleva. Es como una enorme plaga que no hace más que extenderse y extenderse cual virus sin cura. Gracias a dios, son modas, y todas ellas acaban pasando.
De todos modos, el concepto de moda, yo al menos, no lo veo así. Yo lo veo como una forma de decir como estás hoy, triste, contenta, con ganas de llamar la atención, de pasar desapercibida, o de simplemente decir, "hola, existo."
Es cierto que acabaremos comprando algunas de esas cosas, porque no queda opción, o eso o nada, y algunas nos gustan realmente, a veces durante un período de tiempo algo leve, pero nos gustan. En ese caso, ya que compras algo tan común actualmente y que sabes que miles de personas llevan, ¿por qué no adaptarlo a ti? Así lo veo yo. La forma de llevar las cosas de cada persona, la forma de combinar de modificar a cada uno la tendencia, eso es lo que hace en uno esa personalidad que yo veo reflejada en muchas personas al caminar por la calle y pararme a observar. Obviamente, no va definida una personalidad en una apariencia, claro que no. Esto solo pasa a veces, pero para todo hay excepciones amigos, por eso somos un jardín de flores de colores, uno donde muchas son iguales, y en cambio otras destacan por ser diferentes. Tampoco os voy a soltar el rollo hipster tan actualmente de moda (otra vez esta palabra) que todos tenemos tan sabido "ser diferente es ser especial". NO. Cada uno es como es, y toda opinión seguirá siendo un libro abierto a mil y una críticas, porque cada persona piensa de una forma diferente, cada persona ve algo, ve lo malo o lo bueno, eso depende de la opinión que posteriormente nos hayamos hecho en nuestra mente de dicha persona. Para muchos puedes ser una flor diferente, de un color exótico al que le encantaría conocer, en cambio para otros de uno más habitual, al que ya tienen demasiado visto.
¿Qué debemos hacer entonces? Yo creo que es tan sencillo como rodearte de florecillas para las cuales eres exótica y de verdad quieren conocerte en profundidad, y no de las que no quieren conocerte.

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